domingo, 28 de octubre de 2012

El Patrón Piamontés



Al igual que el Patrón Belgo-Genovés, el Patrón Piamontés es un claro derivado del Patrón de París, con el cual comparte casi todas las características de los atributos de las figuras, diferenciándose de los anteriores en que la división es horizontal y no diagonal. Esto es particularmente interesante, pues esto permite ver características en algunas de las figuras que se han perdido en los otros patrones en razón de la división diagonal, tales como el orbe en la mano izquierda del rey de corazones o las alabardas en las manos izquierdas de todos los valets. Como su nombre lo indica, este patrón es utilizado en la región del Piamonte en Italia.

La baraja en mi colección es fabricada por Dal Negro y mide 82 mm. x 51 mm. Sus dimensiones y forma alargada coinciden con las de otros patrones utilizados en Italia, al igual que la ausencia de índices.

La International Playing Card Society no tiene catalogado este patrón.


El Patrón Belgo-Genovés



Los productores franceses de cartas, hasta la desaparición del impuesto sobre las Barajas, podían imprimir bajo sus propios moldes patrones para la exportación. El diseño de estos naipes que no eran objeto de impuestos debían claramente distinguirse del portrait officiel esto es el Patrón de París, por lo que no podían usar los nombres tradicionales para reyes, damas y valets. Bajo estas condiciones, se diseñaron varios patrones en Francia, distinto del diseño oficial, pero manteniendo un indudable parecido con él.

El que más se parecía al Patrón de París, y a su vez el que más éxito tuvo fue el patrón originalmente producido por B. P. Grimaud, en París, alrededor de 1860. Las principales diferencias con el Patrón de París son:
  • J tiene un escudo triangular en vez del escudo oval, pareciéndose a las armas de los Países Bajos Españoles.
  • En la mayoría de las variantes (excepto las de Bélgica) los nombres tradicionales (Charles, Alexandre, etc.) han sido reemplazados por el del fabricante.
  • La línea diagonal divisoria carece de círculos con un punto central.
  • Frecuentemente el verde reemplaza el azul, u otro color, del Patrón de París.
El producto de Grimaud era usado en casinos en varias partes de Europa, habiendo tenido particular éxito en la región de Génova, donde reemplazó otros patrones tradicionales. En Bélgica, los jugadores de cartas ya lo utilizaban a fines del s. 19, pero se convirtió en el patrón nacional belga tan sólo después de la II Guerra Mundial. De aquí el nombre común del patrón como Belgo-Genovés.

Este patrón es el segundo más utilizado a nivel mundial, después del Anglo-Americano, aunque está en proceso de ser reemplazado por este último en muchos sitios del Mediterráneo (Grecia, Egipto, etc.) donde antes era ampliamente utilizado.

El ejemplar en mi colección, de la fábrica italiana Dal Negro, mide 89 mm. x 58 mm. En común con otras barajas utilizadas en Italia carece de índices.

La International Playing Card Society cataloga este patrón bajo el número 80.



El Patrón de París o Patrón Nacional Francés



El Patrón de París, también conocido como Patrón Nacional Francés por las razones que se verán más adelante, es el actualmente más utilizado en Francia y es la base sobre la cual se han producido muchos de los patrones estándares actualmente utilizados en Europa.

En 1701, Francia impuso –por segunda vez- un impuesto a las barajas. Con el fin de facilitar el trabajo de los colectores de impuestos, se establecieron nueve regiones impositivas, cada una con un patrón distinto, que  los productores no podían modificar. Estas regiones eran París, Lyon, Borgoña (Bourgogne), Auvernia (Auvergne), Limusín (Limousin), Delfinado (Dauphiné), Provenza (Provence), Lenguadoc (Languedoc) y Guyena (Guyenne). Es importante anotar que los patrones dispuestos por la autoridad no eran nuevos sino que estaban basados en diseños con más de 200 años de antigüedad, que evidentemente compartían un antecesor común. Un patrón que no consta en esta lista de regiones, pero que es de fundamental importancia, es el denominado de Ruán (Rouen) el cual, en una de sus variantes, es el antepasado de las cartas anglo-americanas, esto es el naipe más utilizado a nivel mundial.

En 1780, las autoridades decidieron adoptar el Patrón de París como un diseño nacional, por lo cual el otro nombre utilizado para este patrón es el de Nacional Francés. Con la Revolución Francesa, los reyes y reinas de la baraja fueron, de alguna manera, también decapitados, perdiendo primero sus coronas y luego desapareciendo por completo, siendo sustituidos en alguna baraja producida en la época por personajes más conformes con los tiempos.

Con la llegada de Napoleón al poder, se comisionó a Jacques Louis David, designado pintor oficial en 1804, para que diseñe unas nuevas barajas para las cuales posó el mismo Emperador. A pesar de esto, Bonaparte no quedó satisfecho con el resultado, por lo que solicitó al grabador-medallista Gatteaux para que en 1811 rediseñe el naipe; este esfuerzo tampoco fue bien recibido. En 1813, Gatteaux  volvió a hacer un diseño basado en el antiguo Patrón de París que, con rediseños de 1816, 1827 y 1853, es el que se sigue utilizando actualmente.

Una característica de este naipe, compartido por otros patrones franceses antiguos, es el haber dado nombre a las figuras: los Reyes, Charles (por Carlomagno) en corazones, David (por el rey bíblico) en picas, Cesar (por Julio César) en diamantes, Alexandre (por Alejandro Magno) en tréboles; las Damas, Judith (reina bíblica) en corazones, Pallas (por Palas Atenea) en picas, Rachel (otra reina bíblica) en diamantes, Argine (anagrama de Regina) en tréboles; los valets, Lahire (compañero de armas de Juana de Arco) en corazones, Hogier u Ogier (cercano a Carlomagno) en picas, Hector (el Héctor troyano) en diamantes y Lancelot (el de la mesa redonda, aunque este nombre sólo se adoptó en el s. 18) en tréboles.

Muchas de las características de cada uno de estos personajes se perdieron por el corte diagonal que se introdujo con las cartas en doble punta o reversibles, pero sí son visibles en varios patrones europeos derivados del de Paris, como se verá en otras entradas de este blog.

El rey de corazones (Carlomagno) sostiene una espada en su mano derecha y un orbe en la izquierda, el de picas (David) una espada –modernamente reemplazada por un cetro- y apropiadamente el arpa,  el de diamantes (César) un cetro en su mano izquierda y un escudo bajo la cintura, el de tréboles (Alejandro) un cetro y un escudo en su mano derecha. La reina de corazones (Judith) sostiene en su mano derecha una flor, la de espadas (Palas Atenea) tiene un escudo y sostiene una flor en su derecha, siendo presentada de perfil, la reina de diamantes (Raquel) sostiene una flor en su mano izquierda, aunque modernamente sólo la flor es visible, la de diamantes (Argine) sostiene un abanico en su mano izquierda, aunque no es visible en el patrón moderno. Todos lo valets sostienen una alabarda en sus manos izquierdas, aunque han desaparecido en el patrón moderno, el de trébol sostiene en su mano derecha un escudo que solía llevar el año 1853, el del último diseño de esta baraja. Los ases tienen un índice numérico (1) antes que una letra.

La baraja de mi colección, producida por la empresa italiana Dal Negro, mide 89 mm. x 58 mm. Debido a que utiliza índices en las cuatro puntas, los nombres de las figuras no son claramente visibles.

La International Playing Card Society tiene catalogado el Patrón de París bajo el número 112.



domingo, 16 de septiembre de 2012

El Patrón de Cádiz



En 1811 terminó el monopolio de exportación que tenía la Real Fábrica de Naipes de Macharaviaya (Málaga), con lo que fabricantes de naipes independientes en España aprovecharon la oportunidad para ampliar sus mercados. Aquellos basados en Cádiz se mostraron particularmente activos y su versión del Patrón Nacional Español asumió características propias, las cuales ya se encuentran en ejemplares tempranos de L. Marchand (1812) y Mariano Mafei (1818), para establecerse definitivamente en barajas posteriores como las producidas por C. Somarriva (1842) y J. Acuaviva (1848).

Al haber sido este un naipe fundamentalmente fabricado para el mercado extranjero, sus diseños fueron más conocidos fuera de España que dentro del país. Habiendo sido México su principal destino, este patrón ha pasado a ser, hasta ahora, el más común en ese país, donde es también manufacturado por imprentas locales. Lo mismo sucedió en otras antiguas colonias españolas, como las Filipinas y en Centroamérica, aunque ya no es utilizado en España.

En España, la fábrica de naipes Fournier, de Vitoria, produce aún este patrón para la exportación. Es el caso de la baraja presente en mi colección bajo la marca “Dos Tigres” destinado al mercado filipino e incluso el sudeste asiático, en los sitios donde aún se utilizan los naipes españoles.

Este patrón repite la forma arcaica del Patrón Nacional Español en los lados rectos de las copas; las figures de bastos suelen tener también los símbolos de su palo similares al de ese diseño. Los reyes y caballeros usualmente tienen bigotes; los pies de los reyes son visibles bajo sus túnicas. Todos los caballeros y las sotas llevan pantalones abombados hasta la rodilla; la mayoría de los pantalones al igual que algunas de las mangas parecen ser  acolchados. La frase "AHI VA" (con distintas ortografías) aparece ordinariamente en el caballo de copas. Los naipes de oros suelen mostrar muchos adornos y leyendas, como es el caso del ejemplo de Fournier mostrado a continuación.

La baraja suele tener 40 naipes (Rey, caballo, sota, 7 – as) o 48 (rey, caballo, sota, 9 – as).

Este ejemplar mide 96 mm. x 61 mm.

La International Playing Card Society ha catalogado este patrón bajo el número 23.






martes, 11 de septiembre de 2012

El Patrón Nacional Español



De entre mi colección presentaré como primer ejemplo de naipe con palos españoles el denominado Patrón Nacional Español que, curiosamente, como veremos más adelante, ya no es producido en España desde hace más de 150 años.

Aunque ya existen referencias a cartas de jugar en España en documentos datados desde 1380, han sobrevivido muy pocos ejemplos anteriores al siglo 18, por lo que no es seguro afirmar que el tipo de naipes que conocemos como españoles hayan sido utilizados –en España- antes de 1600. Es durante los siglos 17 y 18 que las cartas en España tomaron dos o tres formas distintas, de las cuales el “nacional español” es el único patrón que sigue siendo fabricado. El Museo de Naipes Fournier en Vitoria, conserva un ejemplo fabricado por el catalán Pere Rotxotxo; igualmente se conocen los producidos por la Real Fábrica de Madrid y por la de Macharaviaya, a fines del siglo 18 y principios del 19. Posteriormente, este diseño en su forma pura dejó de producirse en España, pero continuó siendo fabricado por franceses, para el mercado norafricano, y en algunos países sudamericanos, incluyendo el Ecuador.

Entre algunas de sus características, podemos ver que los reyes son imberbes, con túnicas que cubren sus pies. En el palo de bastos, el bastón rey se divide en dos puntas, el del caballo tiene forma en “S”, y el de la sota parece un embudo. Todos los caballos están encabritados, y en el de copas aparece por lo bajo la frase “Ahí va” o “Ahiva”, a partir de mediados del siglo 18.

Aunque se conocen barajas de este patrón con 52 cartas a principios del siglo 19, los actualmente elaborados tienen entre 48 y 40 cartas: (rey, caballo, sota, 9 – as o 7 – as).

El ejemplar presente en mi colección está fabricado por A. Camoin & Cie., de Marsella y Casablanca, la cual elaboró cartas –siempre para el mercado magrebí- hasta 1971.

Las cartas miden 83 mm. x 54 mm.

La International Playing Card Society ha catalogado este patrón con el número 20.